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“Filmar en 35mm siempre me traerá hermosos recuerdos, pero es un hecho que hay que filmar en digital”
A vísperas del curso de escritura de guiones para cine, tv e internet que impartirá en Wynwood, Miami; hablamos con el reconocido cineasta Thaelman Urgelles, quien nos comentó acerca de su próximo proyecto, Aufini La Película, el curso, y del guión cinematográfico.
1. Hace unos meses lanzaste la propuesta de hacer una película sobre la jueza Afiuni, cuéntanos, ¿por qué de tantas historias para escoger te llamó tanto la atención esta?
Porque la persecución contra la Juez Afiuni contiene una gran cantidad de aristas que permiten sintetizar la desgracia que significó la revolución de Chávez para Venezuela. El abuso de poder, la corrupción, la destrucción del sistema judicial y su dominio total por un presidente, la participación de los militares en la represión de los ciudadanos, la complicidad de muchos para que esas atrocidades se cometieran; y enfrente de eso, la dignidad de una mujer que sólo cumplió con su deber y por lo cual recibió el más perverso de los castigos, y la solidaridad que ella recibió de una ciudadanía dispuesta a hacer valer los valores de la verdad y la justicia. Junto a ello rendimos un merecido homenaje a las mujeres de Venezuela, que han estado en primera línea en la lucha democrática librada contra la satrapía chavista.
De paso, continúo trabajando el proyecto. Tengo un guión muy bien elaborado, un estupendo teaser promocional y otros materiales publicitarios y de producción para lanzar próximamente el desarrollo del proyecto.
2. ¿Harías una segunda parte de alguna de tus películas?
Hay dos que con frecuencia me suelen sugerir que les haga secuelas: La Boda y La Generación Halley. Y en verdad, las dos se prestan para una operación como esa.
La Boda, porque es una película de fuerte contenido político donde convive una serie de personajes arquetípicos de nuestra sociedad; una película que cumplió ya 34 años y de algún modo anuncia la situación que se presentó en el país 20 años después de realizada. Resultaría por ello interesante saber cómo se hubiese comportado cada uno de aquellos personajes en el proceso socio-político de estos últimos años.
Y La Generación Halley porque ella cuenta la historia de un grupo de adolescentes en los años 80; personajes también arquetípicos, en cierto modo, de una época que marcó fuertemente a quienes hoy tienen entre 42 y 50 años. En estos años he visto que ella se convirtió en una película de culto para miles de venezolanos que hoy tienen esas edades. También sería atractivo ver qué pasó con esos muchachos, cómo desarrollaron sus vidas y cómo se han ajustado a las transformaciones vividas por Venezuela en estos años.
3. ¿Qué opinas del cine digital?
Al principio le tenía desconfianza a ese cambio, por aquello de que no se iba a poder igualar la calidad y textura especial que tiene la película cinematográfica, pero ya la tecnología nos demostró que sí se puede igualar y hasta mejorar, con la ventaja de que te abre posibilidades más amplia para post-producir, crear efectos, etc.
También al principio, pensé que el digital iba a cerrar la brecha entre las producciones independientes y las costosas realizaciones de Hollywood, y no fue exactamente así. Hay en el digital una suerte de trampa para el cine como arte, porque la reducción de costos de producción que supone evitarse laboratorios, sofisticadas cámaras de cine, etc., hace que todo el mundo crea que puede hacer una película, y eso en algún modo disminuye los niveles de exigencias que suponía producir en celuloide.
Hay mucha película mediocre, porque cualquiera con una cámara de 2000 dólares y una laptop hace un largometraje, aunque es cierto que se producen obras geniales con esas mismas herramientas. Por otra parte, la gran industria se las arregló para ensanchar la brecha, al utilizar el digital –y otras tecnologías concomitantes- para generar productos de entretenimiento de alto costo y ambición visual, que han terminado por acaparar las pantallas de cine dejando un espacio menos que marginal para el arte cinematográfico. Es lo que ha producido que el mayor talento creativo audiovisual se haya desplazado hacia la TV y el Internet.
4. ¿Prefieres trabajar con cámara de 35mm o con la digital?
A estas alturas la pregunta no es pertinente. Filmar en 35 siempre me traerá hermosos recuerdos, pero es un hecho que hay que filmar en digital. Por ahí ha surgido una opción de síntesis, que es el relanzamiento por Kodak del Super 8, con muchos componentes digitales. No lo he examinado con detenimiento, pero me parece que podría ser una opción muy válida para producir películas independientes de bajo costo y con la dulzura de la emulsión química que quizá no podrá ser igualada por los bites. Me produce además mucha nostalgia, porque yo comencé filmando en Super 8.
5. Llevas muchos años en esta carrera. Hay gente que piensa que tener éxito es una cuestión más de conexiones o influencia que de talento. ¿Cuál es tu opinión al respecto?
Esta mañana pensaba en eso. Creo que depende del lugar y el tiempo donde se haga la carrera influyen en cuál de los dos factores priva para el éxito de un cineasta o artista de cualquier rama. No siempre el talento va unido con la capacidad para reunir apoyos, ello hace que artistas muy talentosos no hayan podido desarrollar sus carreras plenamente y gente mediocre lo haya logrado a través de conexiones. Ahora, hacer una larga carrera con obras de cierto relieve requiere sin duda de talento, cultura y todas las virtudes que hacen a un creador. Un mediocre con conexiones tendrá un recorrido más corto, aunque siga produciendo; porque la gente pronto comenzará a cazarle las goteras.
6. ¿Has conocido algún caso de alguien que sin tener ninguna influencia en los medios ha llegado a vender su proyecto?
He conocido muchos, por lo menos en el ámbito que he conocido bien que es el cine venezolano. Durante 40 años, allá hemos intentado muchas modalidades para disminuir ese factor del amiguismo y la preferencia, a través de comisiones con distintos formatos, instructivos y metodologías, siempre en busca de la objetividad. Y no tengo noticias de un buen proyecto que no se haya producido, algunos han esperado varias comisiones para ser aprobados y varios de ellos lo agradecen, porque los rechazos y esperas les permitieron mejorar los proyectos hasta llevarlos al éxito alcanzado.
7. Desde hace un tiempo llevas dictando el curso: Escritura de Guiones para Cine, TV e Internet, ¿a quienes recomiendas tomar este curso?
En primer lugar a quienes desean contar historias audiovisuales y tienen habilidades para escribir. Pero también a los directores, productores y actores de cine, televisión y teatro, porque la buena lectura de los guiones es fundamental para conocer a fondo los valores de un proyecto, de cara a su mejoramiento en cada proceso de la producción. El actor que sabe de guión estará mejor dotado para la interpretación de sus personajes.
8. ¿Qué debería tener todo guionista para tener éxito?
Vocación para el trabajo, amplia cultura en los más distintos temas (o sea recorrido de lectura), capacidad de síntesis, pericia para redactar con elegancia, eficiencia y sin floripondismo, y sobre todo ver cine y buena televisión.
9. ¿Qué debe tener más fuerza en una historia, el argumento o los personajes?
Soy un creyente en que la solidez de un guión –y por ello del producto audiovisual- descansa en la estructura, o sea en una organización del relato lo más cercana a la perfección. Un argumento puede no ser muy espectacular y con personajes nada extraordinarios, pero si está bien estructurado convocará la atención fiel de un público. Por supuesto que en esto no hay un caso definitivo, hay historias que descansan en la originalidad del argumento y otras nacen a partir de la singularidad y atractivo de sus personajes.
10. En cuanto al diálogo de los guiones, danos un tip
Tengo muchos, pero te daré sólo un par. Si te los doy todos tus lectores no tendrán necesidad de venir a mis cursos.
El diálogo debe estar subordinado a la acción visual, que es el agente narrativo principal del audiovisual.
Los diálogos deben ser esenciales, ir al grano y desechar todo lo accesorio. A menos, por supuesto, de que para un personaje, una escena o hasta un proyecto entero el autor busque un estilo deliberadamente hiperbólico en palabras, como en ciertas películas de Woody Allen o Tarantino.
11. Eres de los que cree que el paradigma de Syd Field es la única fórmula que se debe aplicar siempre para que la película sea comercial?
Para una película que busca mucho público pareciera que el paradigma es un punto de apoyo casi dogmático. Soy un defensor del maestro Syd Field, pero creo que hay otras variantes estructurales que te pueden conducir a relatos cinematográficos válidos y ambiciosos.
En el cine no debe haber dogmas ni ideas cerradas, pero “de que vuelan vuelan”.
Exreaordinaria la entrevista, y muy didácticas tus respuesta. Me agrada haber leída la entrevista porque el percance de tu enfermedad, a Dios gracias superada, tronchó el curso que tanto aproveché, pero me faltó conocer esas realidades y pienso que retomé el camino. La revisión me sirvió para corregir algunos errores. Pero, la lentitud de José Luis arreglándome la computadora, supera a Tibisay Lucena contando el 1% de la validación de las huellas del Revocatorio. a estas alturas desde el momento en que me entregaste los números del Final Draft, todavía no ha venido a instalarlo y yo concluí la revisión a lápiz en una copia.. Cuando lo tenga listo.te lo envío.
Un abrazo hermano y saludos a Malenín,
C.